¡Buenos días! Si contamos
las horas que tiene un día siempre encontramos instantes maravillosos y otros
para olvidar. Si por la noche hacemos balance acabamos encontrando el
equilibrio necesario para cerrar los ojos y terminar la jornada con buen o mal
sabor de boca.
Tengo una amiga
reencontrada hace poco que vive en Italia, durante mi juventud era mi amiga
inseparable, de aquellas con las que me pasaba horas al teléfono aunque acabara
de verla. Íbamos juntas a todas partes, nos apoyábamos y compartíamos
confidencias. Es increíble cómo el Cosmos nos prepara para no olvidar los lazos
de unión a pesar de la distancia de los años, el otro día la vi y parecía que
nos hubiéramos despedid el día anterior y no diecisiete años atrás.
A media tarde recibí un Whatsapp suyo:
Ogni
cambiamento nasce dalle idee. Tu dipingi, scrivi storie, canti. Quando sbagli,
impari dai tuoi errori. E quando tutti ti dicono che è inutile, segui il tuo
istinto e continui a creare. Sei un guerriero delle idee.
Rápidamente le contesté: «¡Yo no sé italiano! Jejeje,
¿cómo va todo?». A los pocos minutos me habló un poquito de su vida y me envió
la traducción:
Cada cambio nace de las ideas. Tu pintas,
escribes, cantas. Cuando te equivocas, aprendes de tus errores. Y cuando todos
te dicen que es inútil, sigues tu instinto y continuas creando. Eres un
guerrero de las ideas.
¡Me encanta! Resume a la perfección mis sentimientos, es
como si me retratara por dentro y me diera un lema fantástico para continuar
creyendo que vale la pena escribir: ¡soy una guerrera de las ideas!
